En unas fechas como
estas, en mayo de 1923, finalizaba la “V Conferencia Panamericana", en Santiago
de Chile, donde la delegación del gobierno de Juan Vicente Gómez llevó una
proposición de disminuir el consumo de licor en los países de América. Era la secuela de una tendencia del gobierno
gomecista en contra de la venta y consumo legales del alcohol, mas tímidas que
las que en ese momento se ejecutaban en Norteamérica. El 25 de junio de 1910 el
dictador Juan Vicente Gómez promulgó la “Ley de Enseñanza Antialcohólica”. Esta ley, sutilmente, atendía a una corriente
social conocida como “Atemperamiento” ("temperance" en inglés) que se inició en
los EE.UU. a finales del siglo XIX y que sostenía que para mejorar el
desarrollo de la sociedad, disminuir la pobreza, la delincuencia, la violencia,
la prostitución, el desempleo, el alcoholismo y la niñez abandonada era
necesario prohibir radicalmente la venta y consumo de bebidas alcohólicas.
En
nuestro país uno de los promotores de esta corriente social era el eminente
médico el dr. Luis Razetti. Gómez era personalmente enemigo del licor, a
diferencia de su predecesor y compadre, el otro dictador Cipriano Castro que
era un bebedor incurable, que llegaba al extremo de atender a sus ministros en
medio de borracheras en prostíbulos. En EE.UU. esta corriente tuvo en sus
inicios muchos adeptos, llegando a conseguir la prohibición total de la venta y
consumo de licor, lo que es conocido mundialmente como la “época de la
prohibición” o “ley seca” que se inició a principios de los años veinte y duró
por unos diez años. La ley venezolana de 1910 prohibía el consumo de licor en ciertos lugares y así como al personal que realizaba determinadas labores tales como la conducción de vehículos de tracción animal y a motor. También ordenaba la enseñanza de los inconvenientes del alcohol en cuarteles, escuelas y otros lugares análogos. Más tarde, entre abril y mayo de 1923, al realizarse en Santiago de Chile la V Conferencia Panamericana, la delegación venezolana enviada por Gómez llevó la proposición de “Medidas Tendientes a Disminuir Progresivamente el Consumo de Bebidas Alcohólicas” en toda América, y propuso adoptar en los distintos países una ley de prohibición “para salvar a los pueblos de América del vicio del alcoholismo”. Esta proposición fue la única que no se trató en alguna comisión especial y fue calificada de poco seria.
Panorámica de la V Conferencia Panamericana, en Santiago de Chile donde la delegación venezolana propuso una ley seca para toda América. |
Paradójicamente, mientras se
presentaba una ley contra el licor y los vicios, prácticamente todos los
gobernadores y autoridades gomecistas eran propietarios una red de prostíbulos y garitos ilegales donde
se consumía licor y se efectuaban juegos de envite y azar, así como eran los propietarios
de las loterías. Un caso emblemático fue el del tristemente Santos Matute
Gómez, primo hermano del dictador, quien fue el mayor proxeneta de
Venezuela. Santos, a quien Gómez designó
en diversas oportunidades presidente de varios estados (gobernador) tenía en
cada ciudad que le tocaba gobernar prostíbulos
para los que “compraba” por unas monedas a pobres niñas de familias
campesinas y las sometía a esclavitud sexual en sus negocios. Los lenocinios tenían en su salón principal
un enorme retrato del benemérito general Gómez.
Santos Matute fue el último gobernador gomecista de Carabobo. Tan pronto murió el tirano y cayó el
gomecismo, las mismas rameras de los
prostíbulos de Santos en las afueras de Valencia procedieron a saquear e incendiar los
lenocinios del gobernante gomero.
Santos Matute Gómez, primo del dictador, a su derecha, presidente de varios estados, el gobernador/proxeneta propietario de innumerables prostíbulos. |
La ley seca norteamericana fue un
ejemplo de aquello de que “es peor el remedio que la enfermedad”: Se incrementó
el consumo de alcohol, ahora en forma clandestina, la violencia y la
delincuencia se dispararon a niveles nunca vistos, se incrementó severamente la
corrupción de los funcionarios públicos y aparecieron las mafias violentas
vinculadas al licor clandestino. Quizás
los personeros del gomecismo soñaron con en ser como los mafiosos
norteamericanos, amos y señores del multimillonario negocio del licor ilegal en Venezuela. En la
composición gráfica una sesión de la V Conferencia Panamericana y el dictador
J.V. Gómez junto al proxeneta-gobernador Santos Matute Gómez.
Para leer más: Lavin, John. “UNA AUREOLA PARA GOMEZ” Industrias Gráficas
España, Madrid.