1958: XENOFOBIA EN VENEZUELA
Por
Luis Heraclio Medina Canelón
Hoy es muy común escuchar a los compatriotas
denunciando casos de xenofobia contra venezolanos en el extranjero y repitiendo
aquello de que “en Venezuela sierre se ha recibido a los extranjeros con los
brazos abiertos”; quizás la memoria colectiva es frágil y no se quiera recordar
que también aquí se ha maltratado a los extranjeros.
No nos vamos a referir a los malos tratos que
conocimos contra muchos latinoamericanos en los años 70, 80 y 90, cuando
oleadas de suramericanos vinieron a Venezuela huyendo de las dictaduras y de la pobreza de su países, quizás eso no
fue xenofobia sino mas bien casos aislados de explotación y desprecio de
reducidos sectores a los venidos de otras tierras, Hoy vamos a tratar hoy es un verdadero y
grave caso de xenofobia, en su más concreta acepción, entendida como odio a
todo un grupo de extranjeros.
Corría el mes de febrero de 1958. El gobierno
de Pérez Jiménez había sido depuesto apenas días antes. Venezuela venía
experimentando un extraordinario proceso de transformación física con
innumerables construcciones civiles. Edificios públicos y privados, centros
comerciales, carreteras y autopistas, líneas ferrocarrileras, represas,
puertos, teleféricos y aeropuertos se construían a lo largo y ancho del país
financiados con la bonanza económica derivada de los buenos precios del
petróleo. Este programa de construcciones se incluía en lo que el gobierno de
aquél entonces llamaba en “Nuevo Ideal Nacional”, que no era otra cosa que la
modernización del país, que también,
entre incluía la inmigración de europeos que escapando de la devastada y
empobrecida Europa vinieran a incorporar sus conocimientos y fuerza laboral y a
revitalizar la sangre de la población venezolana. Decenas de miles de
portugueses, españoles y especialmente italianos llegaron a nuestro país a
trabajar en centenares de obras que ejecutaba el gobierno nacional. Los
técnicos, agricultores y obreros a poco de llegar enviaban por sus mujeres e
hijos, quienes rápídamente se fueron integrando a la sociedad y a su vez
trabajando en los mas variados destinos. Se calcula que unos 300.000 italianos
llegaron a Venezuela en esos años, en lo que se conocía como la política de
“puertas abiertas” del gobierno nacional.
El magnate de la construcción Filippo Gagliardi. |
De todos estos inmigrantes italianos el más
conocido fue Filippo Gagliardi, un constructor que había llegado al país mucho
antes que la mayoría de sus paisanos y quien empieza a destacar en 1950 con la
modernización de Caracas, al construir edificios de apartamentos que vende con
la modalidad de propiedad horizontal. El
italiano rápidamente consigue créditos de la banca pública y se convierte en un
magnate inmobiliario, que se vincula con personajes del gobierno, lo que a su
vez le “facilita” la obtención de los trámites legales para construir. A su vez se convierte en promotor y protector
de más inmigración italiana, ayudando a sus compatriotas a establecerse y
dándoles cobijo y amparo en sus primeros
tiempos de arribo al país. Gagliardi se
hace un personaje muy conocido por la sociedad venezolana, ya que también es un
filántropo, que no escatima a la hora de contribuir con una obra social. Se recuerda la anécdota ocurrida en el
transcurso de un programa televisivo llamado “Telemaratón” (una cadena de todas
las televisoras para recaudar fondos para una obra de caridad) que el animador
Amador Bendayán, anunciaba la llamada telefónica de Gagliardi donando una
fuerte suma de dinero. Bendayán, que también era humorista, imitando el acento
italiano dijo:
-“Filipo eso es poquito¡ Pónle otro cero¡”
Al poco rato, se anunciaba la llamada del
industrial italiano anunciando que multiplicaba la ya gruesa suma, agregándole
el otro cero.
Pero evidentemente, el constructor estaba muy
vinculado al gobierno de Pérez Jiménez.
Cuando se produce el referéndum a finales de 1957 Filippo Gagliardi
encabeza un movimiento de italianos que firmarían a favor del gobierno en la
consulta popular. Es de recordar que el Congreso por medio de una ley
autorizaba a los extranjeros con más de dos años en el país para votar en el
referéndum. En todos los medios de
prensa aparece Gagliardi y una gran cantidad de sus compatriotas apoyando al
general-presidente y entregando millares de firmas a favor del gobierno.
Cuando se anuncian los resultados del
plebiscito dando por ganadora a la opción del gobierno, la oposición denuncia el fraude y se produce la crisis que va a terminar con la
salida del gobierno de Pérez Jiménez el 23 de enero.
Las colas para votar en el plebiscito de 1957 |
Ya en los sucesos de enero varios comercios de
italianos habían sido saqueados e incendiados pero es a partir de mediados de
febrero, que se empiezan a producir una serie de acciones en contra de la
comunidad italiana en Caracas. Se corrió el rumor de que todos los conserjes de
los edificios de Caracas eran informantes de la Seguridad Nacional.
Muchos miembros de la comunidad italiana recibían llamadas anónimas con
amenazas de muerte. Los italianos eran amenazados e insultados en sus trabajos
y comercios y se les acusaba de perezjimenistas. Circulaban por toda Caracas
panfletos anónimos pidiendo a la comunidad abstenerse de comprar productos en
los establecimientos italianos. Las llamadas amenazantes y los panfletos
señalaban la noche del 24 de febrero como el día que saldrían a quemar los
negocios de los italianos y a asesinarlos. En algunas partes también circularon
unos volantes con la leyenda:
“Españoles y Canarios….Simón Bolívar”
Que recordaba la advertencia bajo pena de muerte a los enemigos de la República.
Fascímil de uno de los panfletos. |
Las agencias internacionales difundieron la noticia
de que en Venezuela se anunciaba una masacre en contra de los italianos. Esto
produjo que muchos italianos atemorizados comenzaron a irse del país. Remataron a precios irrisorios sus bienes
para comprar pasajes para ellos y su familia y regresar a Europa. Desde Italia,
también los familiares reunían lo que podían para enviarlo a quienes aquí
todavía no tenían para pagar sus pasajes para que pudieran abandonar Venezuela
antes de que se produjeran los atentados.
Dentro de la colonia italiana en Venezuela se
produjo un conflicto, ya que algunos italianos acusaban al embajador italiano
de ser el culpable de la situación, ya que no prohibió a sus connacionales adherirse al plebiscito de Pérez Jiménez. Decían que los firmantes ( a veces humildes
obreros) muchas veces lo hicieron
obligados por sus patronos, quienes tenían jugosos contratos con el gobierno y
querían congraciarse con las autoridades. El embajador fue llamado a Roma y
posteriormente fue sustituido por otro diplomático.
La tensión producida fue tan grave que el
Ministerio del Interior hizo radiar un comunicado en el que los rumores de
ataques a la comunidad italiana carecían de fundamento y que no eran
respaldados por ninguna organización y que se tomarían todas las medidas
necesarias para que no pudiera ocurrir ningún incidente. Poco después el Contralmirante Wofgang
Larrazábal, presidente de la
Junta de Gobierno habló por cadena de radio y tv a la nación
y dijo:
“Los brotes contra italianos, portugueses o
españoles se dirigen a crearle dificultades a la Junta de Gobierno, a
fomentar un clima de confusión y de caos…los únicos que tienen interés en tales
hechos son los enemigos de la
Venezuela democrática que se está consolidando”
No tardaron Fedecámaras, la Cámara de Industriales, los
partidos políticos, la prensa, los escolares, los escritores y muchos elementos
de la sociedad en protestar en contra de la campaña anti-italiana. Todos hemos
sido en algún momento descendientes de un inmigrante, decían.
Así, llegó la noche del 24 de Febrero y no pasó
nada, pero ya muchos italianos habían huido. En junio de ese año el gobierno de
Larrazábal canceló la política de “puertas abiertas” que facilitaba la llegada
de inmigrantes de Europa.
Para leer más:
Vallenilla Lanz, Laureano. “Escrito de Memoria”
Edit. Mazatlán. México D.F. 1961
Yanes, Oscar. “Hoy es mañana o las vainas de un
reportero muerto”. Edit. Planeta. 2007. Caracas. Venezuela.
Diccionario Polar de Historia de Venezuela.
https://www.researchgate.net/publication/ 49606939 _LA_INMIGRACION_EN_LA_ADMINISTRACION_DE_PEREZ_JIMENEZLos saqueos de enero y febrero de 1958 |