Aunque este no
es un sitio para discusiones políticas debemos iniciar haciendo una somera
introducción. Históricamente es reiterado ver como los gobernantes marxistas,
hablan de sus adversarios llamándolos “los partidos de derecha”…¿Pero han
existido partidos de derecha en Venezuela? Debemos partir recordando que la
división de los partidos políticos entre derecha e izquierda se remonta a los lejanos
tiempos en que unos se sentaban a la izquierda de los otros en algún parlamento
europeo. Y aunque esas distinciones son
a veces ambiguas, hoy se consideran de izquierda a aquellos que en mayor medida
están influenciados por el pensamiento marxista, que significa, con diversos
matices, la intervención del estado en
gran medida en la vida del individuo, controlando la economía, la educación, el
comercio, la educación de los hijos, la expresión de las ideas, etc. y por el
contrario, serían de derecha aquellos que abogan por la mayor liberalidad
posible en tales aspectos de la vida del hombre: no intervención del estado en
la economía, libertad de comercio, la
libre elección de los padres en la forma y modo de la educación de sus hijos, respeto
a la creatividad, la individualidad, el emprendimiento, etc. Todo con sus distintas variables y las
excepciones que confirman la regla.
Ahora bien,
los partidos políticos existen en la Venezuela moderna a partir del año 1936, a raíz de la muerte
del dictador Juan Vicente Gómez, quien tenía proscritos a todos los
partidos. A partir de ese año el
presidente Eleazar López Contreras inicia una etapa de libertad y democracia y
permite la constitución de los partidos.Y es así que vemos que los primeros
partidos que surgen son los de tendencia
izquierdista, (Partido Comunista y Organización Revolucionaria Venezolana
ORVE de Rómulo Betancourt, ambos de marcada influencia marxista) a lo que
ciertos sectores de la sociedad reaccionan inmediatamente proponiendo los
partidos liberales en lo económico y conservadores en lo social (por eso los
marxistas siempre llaman a sus contrincantes “reaccionarios”). Pero al
contrario de las naciones con sana tradición democrática que le dan al elector
las dos opciones de izquierda y derecha, o sea, marxistas-estatistas y
liberales por otro lado, en nuestro país el panorama ha estado casi
exclusivamente dominado siempre por la pura representación de los partidos
izquierdistas, aunque es lo común que unos izquierdistas califiquen sus
adversarios aunque también sean de izquierda, de “derechistas”.
Ficha de inscripción del PAR-NAC |
Haciendo una
crónica de lo que podríamos llamar partidos de derecha, podemos reseñar la
aparición del primer partido nacionalista venezolano, el PAR-NAC, PARTIDO
NACIONALISTA, surgido en 1936, integrado por antiguos perseguidos de la
dictadura gomecista, partidarios del gobierno de apertura del presidente López
Contreras. En este partido militaron
notables venezolanos recién salidos de las más tenebrosas cárceles del gomecismo
y otros recién llegados del exilio. Este
partido cual tuvo efímera vida. El
PAR-NAC tuvo como símbolo un caballo blanco que corre hacia la derecha y mira a
la izquierda, semejante al que figuraba en el escudo nacional, simbolizando
la libertad, y al fondo un manojo de
espigas que significa la unidad de los venezolanos y dos lanzas cruzadas,
recordando la independencia. No se
identificaba con ningún color en particular.
LA UNE/COPEI
Luego, aparece
de dentro del estudiantado venezolano la Unión Nacional de Estudiantes (UNE)
liderada por Rafael Caldera, como una
oposición a la marxista Federación de Estudiantes de Venezuela (FEV), que
aglutinaba a elementos como Rómulo Betancourt y Jóvito Villalba, . Este
movimiento, formado básicamente por estudiantes católicos, nace en los tiempos de la guerra civil de
España, que tuvo gran impacto en Venezuela y originalmente tenía cierta
inspiración y simpatías con el Movimiento Nacional de España, los falangistas,
de Francisco Franco.
Con el correr del
tiempo la gente de la UNE
funda un partido que va a llamarse Comité de Organización Político Electoral
Independiente (COPEI), que en la segunda mitad de la década de los cuarenta
tuvo violentos enfrentamientos con la izquierda (AD-PCV), pero progresivamente va abandonando sus
principios originales y va haciendo un giro hacia las concepciones
izquierdistas, hasta llegar a convertirse en un espejo de su contrincante de
siempre Acción Democrática, llegando a proponer ideas marxistoides como la
“propiedad comunitaria” esbozada tímidamente en los ochenta. Del mismo modo, cuando
le tocó ejercer el poder, en nada se llegó a diferenciar en la práctica de sus
adversarios adecos.
Estudiantes militantes de la UNE, entre ellos Rafael Caldera, detenidos a raíz de los hechos de violencia en el pasquín humorístico "Fantoches". |
Durante los
gobiernos de Delgado Chalbaud, Germán Suarez Flamerich y Pérez Jiménez (1948/1958)
fueron suprimidos los partidos izquierdistas pero COPEI, tuvo libre
actividad. Su símbolo es una flecha y su
color característico fue el verde.
Durante la
época del gobierno de Marcos Pérez Jiménez apareció un partido pro-gobierno, el
FEI (Frente Electoral Independiente), de escasa duración.
EL MAN
Cuando se
inicia la etapa de la “democracia representativa” conocida también como “pacto
de Punto Fijo” aparece quizás el más genuinamente partido de derecha: el
Movimiento de Acción Nacional, el MAN, de Germán Borregales, un católico
practicante. Su símbolo es la característica “Cruz de Santiago”, una cruz roja
en forma de espada, símbolo ancestral de la lucha de los cristianos.
LOS
PERESJIMENIZTAS
También
aparecen para las elecciones de 1968 la Cruzada Cívica Nacionalista
CCN, que promovía la candidatura al senado del general Marcos Pérez
Jiménez. Esta candidatura obtuvo la
mayor cantidad de votos que cualquier otra opción electoral, siendo elegido de
manera aplastante el general Pérez Jiménez para senador, así como entre otros,
el senador del estado Carabobo, el sacerdote Simón Salvatierra.
Pero valiéndose de artilugios
político-legales Carnet de militante de la CCN |
También
apareció otro partido alegando ser perezjimenista, el llamado Frente Unido
Nacionalista (FUN), de poco arraigo popular, que en su tarjeta presentaba la
cara de un león rugiente.
EL MOVIMIENTO
TFP
Vale la pena
mencionar que en los años ochenta aparece en Venezuela un movimiento social,
con ramificaciones en distintas partes del mundo, de inspiración cristiana, anticomunista
llamado “TRADICION FAMILIA Y PROPIEDAD” TFP, que se dedicaba a divulgar sus
ideas anticomunistas. Era frecuente ver a sus miembros, todos jóvenes
impecablemente vestidos, en formación de parada, con banderas y estandartes, en
algunos semáforos y esquinas de nuestras principales ciudades repartiendo su
folletos y haciendo algún tipo de marchas, que de alguna manera podrían
recordar a una marcha de cruzados europeos. Este movimiento fue perseguido brutalmente por
el gobierno de Jaime Lusinchi como si fuera un grupo terrorista de alta
peligrosidad y quedó totalmente desmantelado. Su símblolo es un león rampante, de aspecto ágil,
con las patas levantadas con mirando de frente al enemigo.
Símbolo del TFP |
EL MIN
Por último, tenemos que finalizando
los setenta irrumpe en la política el empresario valenciano de tv y radio Renny Ottolina, con un mensaje
contra los partidos tradicionales, con una consigna nacionalista, de valorizar
la meritocracia, el trabajo, la moral, el estudio y el respeto a la empresa y a
la propiedad privada. Ottolina, apoyado de una serie de venezolanos que nunca
habían incursionado en política, crea el
Movimiento de Integridad Nacional (MIN) y su símbolo son los lentes de pasta
con los que por años se identificó al locutor en sus programas diarios de
tv. Renny es un experto en manejo de las masas y su mensaje cala rápidamente en
el electorado venezolano, pese a que el gobierno nacional le coarta la
posibilidad de transmitir sus programas de radio y le resulta casi imposible
salir en tv, a la vez que los partidos del sistema y la izquierda comunista
emprenden una feroz campaña de desprestigio personal, que poco efecto causó en
el electorado, al extremo que los observadores lo llegaron a calificar como el
posible “fenómeno electoral” para los comicios de 1978, vaticinándose que podía
llegar a la presidencia o por lo menos a ser la tercera fuerza luego de AD y
Copei.
Renny criticaba la organización
estalinista de los partidos tradicionales, era contrario a la carnetización, a
la identificación del movimiento con algún color y atacaba vehementemente la
partidización de la sociedad, así como la excesiva intervención del estado en
el quehacer de la colectividad. Pero
sorpresivamente, en 1978 Renny Ottolina muere junto a sus principales
colaboradores en un misterioso accidente aéreo.
Muchos fueron “beneficiados” con la repentina desaparición de Renny: los
partidos tradicionales (AD y Copei) que eran implacablemente atacados por el
mensaje anticorrupción y anti partido de Renny, pero sobre todo la izquierda,
que por primera vez iba unida a las elecciones con su candidato José Vicente
Rangel quien con su mensaje de un “socialismo democrático” trataba de seducir
al electorado de la clase media y Renny, el hombre exitoso, que desde abajo y sin ayuda del
estado surgió y progresó, promotor del trabajo, el mérito y la propiedad, daba
un mensaje diametralmente contrario al de los socialistas y comunistas, con
Renny de por medio no tendrían la menor
oportunidad de conseguir alguna significativa votación. Fue sin duda la izquierda la más interesada
en ver desaparecido a Renny Ottolina del panorama político venezolano.
Desde entonces
podemos decir que Venezuela no ha vuelto a tener un partido político de
derecha.